Te sientes con baja energía, ¿será astenia primaveral?
La llegada de la primavera, el aumento de temperaturas, los cambios de presión atmosférica o el ajuste horario, pueden ocasionar que el cuerpo experimente cansancio, fatiga, debilidad, apatía, desidia, pérdida de cabello, inapetencia… Y si, además se suman los primeros síntomas de las típicas alergias ambientales, pueden conformar un “cócktel” para no encontrarse bien por estas fechas.
Las personas que experimentan astenia primaveral han ido en aumento, también quizás puedan influir otros factores como la sobrecarga laboral, la ansiedad, las relaciones sociales y/o personales complejos… Es decir, aspectos psico-sociales que hacen que estemos con más o menos endorfinas (la hormona de la felicidad).
PERO, ¿QUÉ ES LA ASTENIA PRIMAVERAL?
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), no está considerada como una enfermedad sino como un trastorno afectivo estacional siendo muy variable en cada una de las personas que lo padecen.
Las manifestaciones más comunes suelen ser melancolía, dolor muscular, cambios de humor, cefaleas, insomnio, alteraciones en la ingesta, entre otros. Deberán desaparecer frente a un cambio de actitud y/o cambio en diferentes aspectos personales de la persona.
ESTRATEGIAS DIETÉTICAS Y HÁBITOS-CONDUCTUALES
Salvo procesos patológicos descartados y alargados en el tiempo (previo análisis con un especialista), el objetivo es centrarse en mejorar la calidad y la autoestima.
El sueño es uno de los hábitos más afectados, por lo que te aconsejamos que realices una cena ligera con un adelanto de 1.5 h antes de acostarte para conseguir un descanso reparador junto con un alivio digestivo.
Instaura un buen hábito deportivo. Organiza la semana para poder sacar tiempo para pasear, relajarte o simplemente mejorar la respiración con ejercicios guiados; eliminarás la tensión diaria que te hace estar en la cuerda floja.
Evita o restringe el consumo de elementos tóxicos (alcohol y tabaco) para fomentar un buen estado de salud y una mayor irrigación sanguínea. Estarás mucho más despierto.
Un consumo moderado y adecuado de frutas, verduras y hortalizas a diario y en todas las ingestas será lo necesario para tener una buena reserva energética y a “tope de power” para vencer a la astenia primaveral.
Estudios científicos avalan que el consumo de alimentos ultraprocesados se relacionan con una baja calidad en la microbiota intestinal, suponiendo así cambios en el estado anímico, en el peso y por supuesto, en la absorción de nutrientes.
Los expertos psicólogos también recomiendan aprender a terner una actitud positiva, ser proactivo y mantenerse receptivo a todos los estímulos que nos rodean.
El Dietista-Nutricionista puede ayudarte a sobrellevar estos síntomas pasajeros. Si necesitas consulta y contar tu caso, Clínicas Massana cuenta con una red de D-N especializados en cambios conductuales e inserción de nuevos hábitos.
